Una de las principales preocupaciones en una comunidad de vecinos es, en la mayoría de los casos, el gasto comunitario y las posibles derramas que ésta pueda sufrir.
Una preocupación que viene acompañada de una interesante pregunta que los propietarios suelen plantearse en algún momento: ¿Sería posible reducir los costes de la comunidad?
Y tenemos buenas noticias: ¡es posible!
A continuación, hemos reunido 5 acciones que las comunidades pueden llevar a cabo para controlar y optimizar mucho mejor sus gastos. ¡Toma nota!
5 formas de reducir costes en una comunidad de vecinos
Los principales gastos de una comunidad de propietarios están asociados principalmente a suministros, limpieza, seguros y servicio de conserjería, entre otros.
Gastos que en muchas ocasiones tienen un margen de ahorro en el que poder indagar.
Estas son las 5 formas de reducir los costes de una comunidad de vecinos de forma sencilla y eficiente:
1. Revisión de los gastos generales
En función de la antigüedad de una comunidad de vecinos, los gastos mensuales pueden estar asociados a contratos antiguos.
Hacer una revisión de los importes existentes y analizarlos uno a uno puede suponer un importante ahorro total.
- Ajustar la potencia eléctrica contratada.
- Revisar el proveedor de gasóleo y apostar por el que ofrezca una tarifa más competitiva.
- Cambiar la tarifa de la luz.
- Repasar y negociar los gastos que la cuenta bancaria de la comunidad tiene asociada: mantenimiento, giro de recibos, transferencias…
2. Apostar por la eficiencia energética
Formar parte de una comunidad eficiente puede ser muy beneficioso.
Con pequeños gestos, que no implican un gran sobrecoste, se verá reducido el gasto de la factura eléctrica a final de mes.
Algunas de las medidas más efectivas que pueden llevarse a cabo son:
- Usar bombillas LED de bajo consumo.
- Instalar detectores de movimiento.
- Apostar por lámparas fotoeléctricas para la iluminación exterior.
- Ser disciplinados en el ajuste de la iluminación en función de la luz solar.
3. Saldar deudas pendientes
Otra forma de limpiar las cuentas de la comunidad es asegurarse de que se han solucionado todos los casos de morosidad.
Hacer una revisión de las cuotas impagadas y proceder a su reclamación hará que la comunidad se encuentre al día de todos sus beneficios.
4. El conserje y el seguro de la comunidad
Se trata de dos temas que suelen formar parte de las cuentas de una comunidad y de los que también se pueden disminuir costes.
- Unir el servicio de conserjería y el servicio de limpieza. El portero en muchas comunidades es el encargado de ocuparse de la limpieza de la finca. Si se cuenta con su figura, se puede prescindir de contar con una empresa de limpieza.
- Revisar los seguros que actualmente la comunidad tiene contratados y buscar nuevas tarifas y ofertas actuales.
5. Administrador de fincas
Y, por último, una figura que puede hacer posible todos los puntos anteriores de forma completamente eficaz.
Contar con un administrador de fincas eficiente puede ser la solución a la optimización de costes. Y es que su figura es clave en el control de gastos, en la reducción de costes y en la reclamación de deudas.
Un buen administrador pondrá orden en la comunidad y se ocupará de que todo esté controlado.
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